Esta Sección presenta la aportación económica de Japón a la preparación de lo que se convertiría en la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de 2003.

Reunión Internacional de Expertos sobre Patrimonio Cultural Inmaterial
(Río de Janeiro, enero de 2002, 83.500 dólares EE.UU., contribución parcial)

y

Primera, segunda y tercera reuniones de la Reunión Intergubernamental de Expertos para la Elaboración de un Anteproyecto de Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial
(UNESCO, París, septiembre de 2002, 250.860 dólares EE.UU.; febrero de 2003; 250.860 dólares EE.UU.; mayo de 2003, 280.917 dólares EE.UU.)

En una reunión internacional celebrada en 1999 en Washington, se puso de manifiesto que la Recomendación de 1989 para la Salvaguardia de la Cultura Tradicional y Popular, destinada en principio a proteger el patrimonio cultural inmaterial, no había logrado plenamente su objetivo debido a su carácter no vinculante, poco alentador para los Estados. No obstante, la idea de que la preservación del patrimonio cultural inmaterial es tan oportuna como necesaria siguió abriéndose camino, hasta que los expertos propusieron que la UNESCO estudiara la creación de un instrumento jurídico dotado de un carácter más vinculante. Y la Conferencia General de la UNESCO, en su 31ª reunión (2001), decidió efectivamente que la cuestión se rigiera por una convención internacional.

De conformidad con esa decisión, en enero de 2002 se organizó en Río de Janeiro, Brasil, una reunión de expertos, financiada en parte por el UNESCO/Fondo Fiduciario de Japón, para que diera los primeros pasos del largo camino hasta el anteproyecto de Convención. La finalidad de la reunión era reflexionar sobre los ámbitos prioritarios en que ésta debía centrarse. Dicha reunión y otra de seguimiento (celebrada en Junio de 2002) produjeron un primer boceto del anteproyecto de Convención.

En su 164ª reunión (2002), el Consejo Ejecutivo de la UNESCO invitó al Director General de la Organización a convocar una o varias reuniones intergubernamentales “a fin de determinar el alcance del anteproyecto de convención internacional”. En virtud de dicha decisión, el Director General convocó dos plenarias de la reunión correspondiente, que se celebraron en septiembre de 2002 y febrero de 2003. Un texto consolidado, preparado por un grupo de trabajo entre reuniones en abril de 2003, constituyó la base de la tercera reunión, que se celebró en junio del mismo año. Al término de esta última reunión, los expertos gubernamentales habían puesto a punto un proyecto de texto para someterlo al Director General de la UNESCO. Las tres plenarias de la reunión intergubernamental se organizaron con ayuda financiera del UNESCO/Fondo Fiduciario de Japón. Participaron en ellas expertos gubernamentales de Estados Miembros y organizaciones internacionales, como la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), y diversas ONG. La Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultura Inmaterial, adoptada por unanimidad en la 32ª reunión de la Conferencia General, el 17 de octubre de 2003, es el fruto de este largo proceso intelectual, político y jurídico.

Costo total del proyecto US$ 615,277
Organización líder UNESCO Sección del patrimonio inmaterial