El hudhud, relatos cantados de los ifugao
Inscrito en 2008 (3.COM) en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad (proclamado originalmente en 2001)
El hudhud una tradición de cantos narrativos de la comunidad ifugao, conocida por sus arrozales en terrazas en las montañas de la isla septentrional del archipiélago de Filipinas. Esta tradición se practica durante la siembra y la cosecha del arroz, así como en los velatorios y en los ritos fúnebres. El hudhud data probablemente de antes del siglo VII y consta de más de 200 historias de 40 episodios cada una. El recitado completo dura varios días.
Como los ifugao tienen una cultura matrilineal, suele ser la esposa quien lleva la voz cantante en estos relatos, y su hermano ocupa una posición superior a la del marido. Así pues, el hudhud tiene valor en tanto que documento antropológico. La lengua de los relatos, rica en expresiones figuradas y repeticiones, y recurre a las metonimias, metáforas y onomatopeyas, lo que hace que la transcripción resulte muy difícil. Hay muy pocos rastros escritos de esta tradición. Los relatos evocan héroes antiguos, la ley consuetudinaria, las creencias religiosas, las prácticas tradicionales, y reflejan la importancia del cultivo del arroz. Los narradores, principalmente mujeres de edad, ocupan lugares importantes en la comunidad, a la vez como sacerdotisas y como detentadoras de la historia. Las epopeyas hudhud son salmodiadas alternativamente por el primer recitador y por el coro, según un método único para todas las estrofas.
La conversión de los ifugao al catolicismo fragilizó su cultura tradicional. Además, el hudhud estaba asociado a la cosecha manual del arroz, y esta tarea está hoy mecanizada. Aunque los arrozales en terraza están inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial, el número de campesinos disminuye constantemente. Los últimos recitadores son ya muy ancianos y necesitan apoyo en sus esfuerzos para transmitir sus conocimientos y sensibilizar a los jóvenes.