El teatro de marionetas wayang
Inscrito en 2008 (3.COM) en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad (proclamado originalmente en 2003)
Esta forma antigua de narración, famosa por sus marionetas minuciosamente elaboradas y por lo complejo de sus estilos musicales, surgió en la isla indonesia de Java. Durante diez siglos, el wayang se desarrolló tanto en las cortes reales de Java y Balí como en los medios rurales. Hoy, no sólo se practica en esas islas, sino también en Lombok, Madura, Sumatra y Borneo, donde se han desarrollado distintos estilos locales de interpretación y de acompañamiento musical.
Si esas marionetas fabricadas artesanalmente con esmero son de diversas tallas, formas y estilos, dominan dos grandes tipos: la marioneta de madera de tres dimensiones (wayang kitik o golèk), y la marioneta del teatro de sombras, lisa y de cuero (wayang kulit), cuya silueta es proyectada en sombra chinesca en una pantalla. Ambos tipos se distinguen por sus trajes, los rasgos de la cara y los cuerpos articulados. El dalang (maestro marionetista) manipula cuidadosamente los brazos mediante unas varillas muy finas fijadas en las marionetas. Para reforzar el efecto dramático, los cantantes y los músicos interpretan melodías complejas acompañándose de instrumentos de bronce y de gamelan (tambores). En otra época, los marionetistas eran considerados como personas cultas y expertas en transmitir con su arte valores morales y estéticos. Las palabras y las acciones de los personajes cómicos, que representaban al “hombre llano”, constituían artificios eficaces para criticar los problemas sociales y políticos, y es de creer que esta función especial contribuyó a su supervivencia a lo largo de los siglos. Los personajes de los mitos del wayang proceden de los mitos locales, a los cuentos persas o de las antiguas epopeyas indias. El repertorio y las técnicas de interpretación se transmitían oralmente dentro de las familias de los marionetistas, músicos y artesanos que las fabricaban. Los dalang han de ser capaces de aprender de memoria un amplio acervo de historias, declamar fragmentos de relatos antiguos y cantar canciones poéticas, todo ello de manera ingeniosa y creativa.
El teatro de marionetas wayang sigue gozando del interés del público. Pero para hacer frente a la competencia de formas contemporáneas de diversión como el vídeo, la televisión o el karaoke, tienden a exagerar las escenas cómicas en detrimento del argumento de la historia y a reemplazar el acompañamiento musical tradicional por música pop, contribuyendo así a alterar ciertas características de la tradición.