Conocimientos y habilidades tradicionales de la elaboración de sake con moho koji en Japón
Inscrito en 2024 (19.COM) en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad
El sake es una bebida alcohólica a base de cereales y agua, profundamente arraigada en la cultura japonesa. Los artesanos utilizan mohos de koji para transformar el almidón de los ingredientes en azúcar. Supervisan el proceso para asegurarse de que el moho se desarrolle en condiciones óptimas, ajustando la temperatura y la humedad según sea necesario. Su trabajo determina la calidad del sake. Considerado un don sagrado de las deidades, el sake es indispensable en festivales, bodas, ritos de paso y otras ocasiones socioculturales. Aunque hoy en día se produce en masa, los artesanos continúan elaborando el sake de manera tradicional. Los maestros artesanos del sake, llamados “toji”, dirigen a los trabajadores de las bodegas de sake, llamados “kurabito”, en la práctica y transmisión. Originalmente, el sake era fabricado únicamente por mujeres. Los hombres se involucraron en el proceso con el aumento de la demanda. Hoy en día, personas de todos los géneros pueden dominar los conocimientos y habilidades. La fabricación del sake se transmite a través del aprendizaje. Uniones regionales también apoyan a las bodegas, y dos organizaciones nacionales creadas por artesanos contribuyen a la transmisión sistemática de la práctica, con el apoyo financiero y técnico del gobierno japonés. La producción del sake requiere muchas manos y un sólido trabajo en equipo, lo que fomenta los lazos sociales entre los artesanos. También los une a los habitantes de la región, incluidos los agricultores que proporcionan los ingredientes, contribuyendo así a la cohesión social.