La Slava, celebración de la fiesta del santo patrón de las familias
Inscrito en 2014 (9.COM) en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad
En Serbia, las familias cristianas ortodoxas celebran una fiesta importante, denominada la Slava, en honor de su santo patrón doméstico, al que consideraran protector y garante de su prosperidad. La celebración consiste en una ofrenda sacrificial ritual –sin efusión de sangre– y en una fiesta que congrega a la familia y a sus vecinos y amigos. Se enciende un cirio especial en el hogar y se derrama vino sobre la torta de la Slava, cocinada y ornamentada por la esposa del anfitrión, antes de practicar en ella una incisión en forma de cruz, alzarla dándole vueltas y cortarla en cuatro pedazos. Mientras se ejecuta el ritual, se entonan loas en honor del santo patrón y se recitan plegarias para impetrar prosperidad. La división y reparto de la torta la efectúa el anfitrión con el invitado más provecto, o más ilustre, o con otros miembros de la familia. Luego, se inicia la comida con la libación ceremonial de un vaso de vino, la degustación de un plato y un brindis por la salud, fecundidad y bienestar de la familia y de todos sus invitados. En el seno de las familias, las mujeres desempeñan un papel importante en la transmisión de los conocimientos sobre los rituales de esta fiesta, su ejecución, su significado y sus finalidades. La comida de la fiesta de la Slava fortalece las relaciones sociales y juega un papel importante en el mantenimiento y fomento del diálogo en las regiones pluriconfesionales.