La danza budima
Inscrito en 2020 (15.COM) en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad
La budima es una danza guerrera del pueblo we que se baila en cualquier momento del año en el que las circunstancias exijan dar muestras de solemnidad y espiritualidad: ceremonias tradicionales, procesiones fúnebres, bodas, ritos de iniciación, investiduras de jefes, acciones de gracias, celebraciones de cosechas y otros actos rituales. Los bailarines ejecutan la danza provistos de lanzas, hachas ceremoniales, bastones, mazas y escudos, tocando instrumentos musicales tales como silbatos, flautas y trompas, tambores y sonajas. En la danza participan hombres, mujeres y niños. Los hombres representan el papel de guerreros o soldados avezados que blanden con gestos bélicos unas lanzas largas, mientras saltan y se agachan avanzando y retrocediendo dentro y fuera del círculo formado para el baile. Otros cantan y tocan flautas y trompas de una sola nota hechas con cuernos de antílope, o hacen redoblar tambores grandes y pequeños. Engalanadas con collares y brazaletes de cuentas y llevando sonajas en los tobillos, las mujeres cantan a coro y bailan con brío. Los jóvenes adquieren las competencias y conocimientos vinculados a este elemento del patrimonio cultural inmaterial mediante la observación y la práctica. En las ceremonias de iniciación se les instruye acerca de la importancia cultural que tiene esta danza, y también se les enseña a bailarla y a fabricar algunos de los instrumentos musicales que la acompañan. La danza budima constituye un motivo de orgullo y es un factor de unión para los miembros de las comunidades interesadas, que en todo momento pueden participar en ella uniéndose a los bailarines.